EL FINAL DE VERANO LLEGÓ...Y TÚ PARTIRAS

Hola, hola, lo que todos esperabais ya está aquí; una nueva entrega de… la familia guanaco, o la familia gorililla como os guste más, porque Daniel cada día nos llama de una manera. Es gracioso como cada uno de nosotros va evolucionando con el viaje, aprendiendo, creciendo…lo que pasa es que él nos lleva ya siete vueltas… ya se sabe de memoria todas las series del canal de niños de la tv (vale no es el mejor ejemplo), pero no tenemos corazón para no dejarle ver la tele, la mayoría de los programas son los mismos que veía en España, y creo que para él esto supone algo familiar, le hace sentirse como en casa. Me hace mucha gracia cuando me pregunta: Mamá, ¿cómo estás?: estás contenta, supercontenta, triste, enfadada, cansada, harta o normal, elije una de esas cosas…la lista al principio era más corta, pero cada vez van siendo más las opciones, la cosa es que siempre que me lo dice me da la risa, y al final le digo que contenta, claro.

Esta semana estamos viviendo el final de un verano que no hemos vivido ¿no es extraño?, aquí empieza el otoño y el primer día que llovió mirábamos los cristales con melancolía, intentando recordar escenas de playa que nunca existieron, es como el embarazo psicológico (bueno, supongo)…afortunadamente la Semana Santa ya está aquí, y han empezado a llegar argentinos de todas partes, el pueblo tiene un ambientazo que no veas, yo es que ya me siento de aquí, claro. Me acuerdo cuando llegamos que todos los sitios tenían un cartel de “Hay lugar” (hay habitaciones libres), y yo me preguntaba si saldría alguien a la carretera a cambiar el cartelito cuando estuvieran llenos, cosa que por otra parte me parecía imposible dada la quietud del lugar, pero ay¡¡¡ me he tenido que comer mis palabras, porque la carretera se ha llenado de cartelitos de “no hay lugar”.

Ah¡¡ y hemos tenido visita, ya sabía yo que la habitación deshabitada de la cabaña sería nuestra habitación de invitados, la pobre necesitaba algo de vidilla. La cosa es que conocimos a una chilena y a un francés muy majos, Libertad ella, Mateu él, vendedora de broches y demás cosillas hechos con chapas de botellas recicladas ella, malabarista él. La cosa es que no tenían hogar y les adoptamos 3 días, nos contaron un poco su vida, nos echamos unas risas juntos y después cada uno a sus quehaceres, que no queríamos aburguesarles a los pobres, no hubiera sido justo.

Ayer estuvimos en el Cerro tronador, una montaña con un glaciar negro que está cerca de Bariloche, en el parque Nacional de Nahuel Huapi, que más bien parecía el parque Nacional de los coches accidentados, porque ese mismo día se cayeron 3 coches por el terraplén de la carretera, los pobres de la grúa no daban abasto…..Al margen de las estadísticas de la DGT, le llaman el cerro tronador por el ruido que hacen los hielos al caer, este glaciar es negro porque en su avance, el hielo arrastra toda los minerales, piedras etc y adquiere ese color negro característico… estuvimos andando un poquito hasta una de las muchas cascadas que caen de lo alto de la montaña por el deshielo del glaciar…y uff que bonito, ya no había nadie, y sólo se escuchaba la cascada..…y los espíritus del bosque, esas ramitas que crujen, esas hojas que se mueven…quien sabe si habrá algún duendecillo observándonos, o algún mapuche superviviente que se ríe de los turistas.

Aquí los bosques son una pasada, la vegetación es exuberante y los árboles adquieren una y mil formas…y desde luego sería la vivienda ideal para los duendes y hadas…eso debió pensar el creador de un parque temático de seres mitológicos….un porteño que se retiró aquí y hizo 37 esculturas, las colocó en el bosque y se gana la vida cobrando 3 euros por cabeza la entrada, Daniel no paga (como siempre). Nos estuvimos echando unas risas con las hadas guarronas, que más que hadas parecían actrices porno, …que vaya curvas tenían, desde luego no eran muy espirituales que se diga, más bien eran producto de las fantasías nocturnas del propietario me parece a mí. A la salida estuvimos departiendo con él, un señor mayor muy majo con su pipa…con mucho tiempo para hablar de política y de todo lo que se terciara, para deleite del Jozelito, claro.

Y….esto os cuento chicos, la verdad es que aparte de la vidorra que nos estamos dando, intentamos poner los cinco sentidos para aprender un poquito de las mil formas de ganarse la vida que tiene la gente, a ver si podemos aplicarlo a la nuestra cuando volvamos……lo que es seguro es que hay muchas formas de vivir y salir adelante, sólo tienes que descubrir la que más va contigo…eso es lo bueno de viajar ¿no?, y hasta yo que soy occidental a tope, noto que intento mirar con ojos más neutros lo que sucede a mi alrededor.

Un beso a todos